domingo, 19 de octubre de 2008

LAER cumple un año y dice que está cerca del punto de equilibrio

La actual intervención de la compañía aérea estatal entiende que se abre una nueva etapa que apunta a la expansión, la recuperación de rutas, nuevos servicios y se apresta a reclamar ante el Estado nacional una línea de subsidios.
Gualberto Salcerini explica los detalles del proceso, los números de la empresa y las perspectivas ante un escenario diferente para una compañía que —precisa— logró realizar vuelos con el 90 % promedio de ocupación.
Mañana, lunes, se cumplirá un año que comenzaba a carretear el jet sream de la firma Macair Jet SA en el aeropuerto de Paraná reinaugurando no sólo los vuelos desde nuestra provincia a Aeroparque, en Capital Federal, sino también la nueva etapa de Líneas Aéreas de Entre Ríos (LAER) en el mundo de la aeronavegación.
Bien podría afirmarse que esa hora de vuelo —y las más de 1150 que le sucedieron— se hicieron surcando un fuerte viento de frente de una empresa que había sido desmantelada, con pozos de aires económicos producto de una deuda de 23 millones de pesos y la onerosa carga de los errores políticos anteriores y el escepticismo general.
No fue fácil remontar vuelo, y así lo reconoce Gualberto Salcerini, el actual interventor que —según recuerda— fue convocado por Jorge Busti para realizar un informe acerca de la situación de la empresa, en noviembre de 2006, y a partir de allí fijar lineamientos para recuperar la empresa. “El problema fundamental recaía sobre la pesada deuda. LAER venía de años de morosidad, excepto de deudas acuciantes. Así fue que presenté un proyecto que fue aprobado por el Ejecutivo y que contó con la conformidad de, por ese entonces, candidato a gobernador, Sergio Urribarri. Con un pasivo de 23 millones, con el personal que había sido trasladado a dependencias del Gobierno, sin técnicos, sin pilotos. Mi idea era recomponer los sectores administrativo, contable y jurídico”, rememora el funcionario.
El 2007 se desovillaba con rapidez y LAER no lograba arrancar con la idea, a pesar de que, según sus directivos, las negociaciones con Macair Jet, la empresa de vuelos charter propiedad del Grupo Macri, venían bien encaminadas. Se sucedían los pedidos de embargos, no había capital inicial para comenzar a girar la rueda operativa y había unos juicios, especialmente laborales, que el Estado estaba haciendo frente, y de los cuales que el anterior interventor, Juan Canosa, había empezado a poner en caja, por más de 2 millones de pesos, y eso cortaba cualquier recurso para la operatividad.
“Había también que recuperar el único activo tangible de la empresa que es el taller, o lo que le quedaba de él. Yo busqué reactivar la empresa a través del sistema de mantenimiento”. Fue allí que Salcerini tomó una resolución que pudo parecer polémica pero que —ante la consulta de EL DIARIO— evalúa como “totalmente legítima”: venderle a la Fuerza Aérea el stock de repuestos remantes del Fokker que el Estado le había vendido anteriormente y que no tenían utilidad, por 500 mil pesos.
“Más allá de vender servicios, existía un stock considerable de repuestos correspondientes al fokker que había comprado la gestión del anterior gobernador. Ese avión, que le fue vendido a la FF.AA., a LAER no le iba a servir para nada. Y decido venderle los repuestos, a través de una licitación, entre dos organismos estatales, a precio de lista, mucho más alto del precio de mercado. Nos pagan a través de la Tesorería General de la Nación, y de ahí hacemos el pago del primer bloque hora, alrededor de 45 mil dólares. Hacemos un convenio por seis meses con Macair Jet, y garantizamos con eso, más la posible venta de los billetes, un plan de vuelo de seis meses, donde no le íbamos a pedir nada al Estado, pero no podíamos salir a pagar deudas”, rememora el interventor.
Salcerini se emociona cuando relata el primer vuelo. Sólo ocho personas subieron a la nave de 19 plazas, pero entusiasmaba el compromiso de algunos empresarios y entidades privadas y públicas. Con 14 personas y un hangar de 3.500 metros como todo patrimonio, tercerizando desde el avión a los servicios en Aeroparque, LAER comenzó el 20 de octubre de 2007 un nuevo período en su historia corporativa. “El desafío fue recuperar la confianza de la gente. En la misma semana vimos el incremento que se va dando e incluso llegando al 75 %. Respetamos el valor de los horarios y los vuelos”. En la misma semana se sumaron los vuelos desde Concordia, de acuerdo a las necesidades de la ciudad. “Y luego vimos la posibilidad de sumar Gualeguaychú y luego Paso de los Libres, y cuando vimos que ésta tenía buena acogida, lo que hicimos fue establecer un canal directo a Gualeguaychú”, confirma el interventor. La empresa fue cumpliendo con el plan y así la primera etapa avanzó dentro de lo previsto, y aunque parezca una paradoja, el conflicto entre el Gobierno y el campo fue un empujón imprevisto, ya que durante esos prolongados meses, los aviones salían completos y debían agregarse vuelos. Según cuenta Salcerini, debieron sortear avatares económicos y también librar una batalla interna, ya que la Tesorería también es acreedora de la empresa, y debieron más de una vez pedir que no traben fondos depositados. “Establecimos un esquema de pago contado, para que cada peso que ingrese se destine a garantizar la operatividad de la empresa”. Ante cualquier pronóstico, y de acuerdo siempre a lo que afirma Salcerini, la participación de funcionarios públicos en la venta final de pasajes, fue baja. “No llega al 10 %”, dice, y asegura que hasta el Gobernador cuando llega al aeropuerto pasa por ventanilla y paga el ticket. “El Estado ha volado poco con nosotros. Hay entes descentralizados que compran paquetes, pero pocos. El Ejecutivo compra en la agencia que pusimos en el Instituto de Seguro, la abrimos cuando vimos que dábamos un 6 % de comisión a las agencias y podíamos optimizar con una agencia propia. Pero también somos una empresa que brinda servicios al Cucaier y al Incucai, que si hubiesen contratado un avión sanitario para el transporte de órganos debieran disponer de mucho dinero. También al Registro Civil, para traer los DNI y se ahorran dinero”, explica el interventor. Dicen en la empresa que ahora estarían ingresando en la segunda etapa planteada, y advierten que van por más, aunque se mantienen expectantes acerca del futuro de la economía en un marco de recesión global.
—¿A cuánto está LAER del punto de equilibrio?
—Yo creo que estamos muy cerca. Pero si cada vez que entra un dinero me sacan para pagar las deudas...
—¿A cuánto está del punto de equilibrio, sin ponderar el pasivo?
—Aún tenemos un problema con la costa uruguaya que no alcanza el costo operativo. Estamos a un 15 % o un poquito menos del punto de equilibrio... No se olvide que nos ha costado un gran esfuerzo y somos pocos...

Datos importantes
- En el último año 11.000 pasajeros volaron con LAER.
- Los vuelos han salido con un promedio de 90 % de su capacidad.
- El pasaje cuesta 250 pesos, y se evalúa llevarlo a 290.
- En el año LAER facturó cerca de 2,5 millones de pesos.
- La empresa fue capitalizada con 500 mil pesos iniciales, producto de la venta de repuestos del Fokker a la Fuerza Aérea.
- 1 millón de pesos ha aportado, aproximadamente, el Estado provincial para cancelar deudas anteriores durante el último año.
- En este año se realizaron unas 22 horas de vuelos semanales, un total de 1.110 horas en el año. - 1.200 dólares es el costo del alquiler de cada hora de vuelo que LAER paga a Macair Jet.
- Unos 13 millones es la deuda que aún mantiene la empresa de aeronavegación del Estado con distintos acreedores.

La empresa busca el futuro con un avión propio
A pesar de lo que representa en el imaginario colectivo entrerriano, LAER cree que sería clave para la nueva etapa dar un salto cualitativo en lo corporativo. “Nuestra planificación implica ir encajando las próximas acciones en la búsqueda de un avión propio, porque con lo que pagamos hoy por el servicio cómodamente podríamos encarar un leasing”, dice Gualberto Salcerini, argumentado que un jetstream, como el que se usa ahora, cuesta 1,3 millones de dólares, casi lo mismo que se paga por el servicio de alquiler anual del charter. Además agrega: “Entraremos en una etapa de decirle al Estado provincial que nos acompañe en la búsqueda de un avión, porque mientras no tengamos un avión no podemos tener la documentación que los organismos nacionales exigen para devolvernos el certificado de operador. Hoy somos LAER en la comercialización, pero el operador es Macair Jet ante la regulación de transporte aerocomercial. Nosotros hemos solicitado ser incluidos dentro del régimen de subsidios de combustible, que es del 50 % del costo, que nos pondría por encima del punto de equilibrio, es decir que seríamos rentables. Hoy no podemos”, describe. En la cabeza del interventor existen otras ideas y acciones que las vuelca una tras otras y las explica, y vuelve sobre ellas, y vuelve a abordarlas con sus dificultades: “Tenemos que avanzar hacia una tarjeta magnética para evitarnos la papelería; si logramos trabajar con el turismo e integrarnos con los hoteles todo será más rentable para todos; cerramos un acuerdo con el Mayorazgo con beneficios para todos; queremos ser un taller de mecánica regional, y nos estamos ofreciendo a potenciales clientes que necesiten el servicio; conformamos una estructura dinámica y flexible que nos permita operar en momentos difíciles como en la bonanza; tenemos que expandirnos otras rutas que tiene la empresa para no perderlas…Tandil, Necochea, Santa Teresita, Mar del Plata, Montevideo, Punta del Este, Paso de los Libres, Córdoba, etcétera”, todo eso dice Salcerini, y se entusiasma con acompañar el proceso de nacionalización de Aerolíneas Argentinas, “porque tenemos que ser los alimentadores transversales de las rutas regionales”, afirma. Dice también que está estudiando distintas alianzas con otras empresas y que aspira a conformar paquetes terrestres-aéreos con empresas de transporte para viajes en el país, incluso la posibilidad de ser distribuidores de una empresa internacional para la Argentina. Salcerini concluye con una expectativa abierta: “LAER debe ser referente en la Región Centro, porque tenemos má de 22 años de vida y ha demostrado capacidad, y por algo se le otorgaron 51 rutas en su momento, más que Austral. Esto habla de una trayectoria que debemos aprovechar para conectar al país”. (El Diario)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Vamos LAER para adelante!

Tomás Charras dijo...

Coincido, que lindo seria tener avion propio no?